RUMBO A GREDOS NON STOP

"Quizás esta sea una de las crónicas que haga con más desgana, pero solo con que alguien que este dudoso en hacerla en un futuro, tras leerla, decida hacerla o no, me doy por satisfecho, cosa que yo no pude hacer."

Poco a poco iban quedando en el calendario menos días para la que sería la prueba más dura que corría esta temporada. Las Titanes, Algarve Bike, Huelva Xtrema...iban pasando factura a mi cabeza y piernas, añadiéndole que la semana previa a dicha cita, no pude hacer los entrenos como a mi me hubiera gustado, aunque el trabajo ya estuviera hecho de más atrás, acudo a la cita con ganas pero no con la motivación deseada.

Llegó el día previo, 1 de Julio, recojo a Javier García, quien sería mi asistente a lo largo de toda la prueba,  e iría informando a casa de las distintas novedades. Nos dirigimos a Alcorcón, localidad donde se dará el pistoletazo de salida. Vamos derechos a recoger el dorsal y a asistir al briefing informativo. En la recogida de dorsales veo a Bike's Raul, quien dará asistencia mecánica en varios puntos, y quien junto a Gonzalo Barriga, me animarán y transmitirán tranquilidad al saber de su presenciaa en dicho evento.

Llega la hora de la charla informativa (Briefing), en ella se plantean un par de preguntas claves, de las cuales sacaré respuesta al finalizar la jornada del día siguiente:

- La primera fue sobre el descenso tan criticado en los foros (foromtb.rumbo-a-gredos-non-stop), la bajada del Pico, se pedía información sobre la misma, tipo de terreno... La respuesta fue, que era una bajada de 1,7km, tipo camino senderista, donde habría que poner más de una vez el pie, cuyo informante tardaba en bajarla 20 minutos, transmitiendo que el "temía" más la subida que la bajada.
- La segunda pregunta fue si alguien había hecho alguna vez el recorrido entero, para saber la media y el tiempo, la respuesta fue un NO, nadie la había hecho entera, del tirón, si la habían hecho anteriormente en dos etapas, y la organización había hecho tramos sueltos, pero ninguno la había hecho de una sola vez.....

Se acaba la charla y sin perder tiempo vamos al hotel, cenamos y rápidamente intentamos dormir lo antes posible, aunque costo lo suyo.

Son las 04:15, del sábado 2 de Julio, suena el despertador, hay que desayunar bien, ya que en apenas 1h30' se tomará el inicio de la prueba.

05:30, nos encontramos en en lugar de salida, allí veo caras amigas como  Ángel Denche y Gonzalo Barriga. Me coloco en primera línea de salida, a mi lado Brandan Marquez, campeón de España de Ultramaratón.

Pistoletazo de salida, primeros kilómetros neutralizados hasta salir de Alcorcón. Aunque sea una marcha "no competitiva" durante el tramo cronometrado se ven los nervios habituales para intentar mantener los puestos cabeceros. Se apartan las motos, y la gente sale disparada, parece mentira que por delante queden más de 200 km, decido no dejarme llevar y voy a mi ritmo, aunque me cuesta encontrar ese punto, esas sensaciones que encontraba al principio de otras pruebas.

Se rueda muy rápido, el terreno invita a ello, aunque hay que tener precaución, pues hay numerosas zonas de arena suelta donde la bicicleta es difícil de controlar. Poco a poco voy cogiendo ritmo y logro conectar con un buen grupo, donde se encuentra una cara conocida de alguna titan, como es el caso de Antonio Martinez. Rondando en dicho grupo escucho una voz que se dirige a mi, "Titán!!!", se trata de Curro Gomez, del equipo Fernando Torres, con quien también he compartido este año alguna titán. Rodamos en un grupo de unos 7 bikers, con quien compartiré diferentes tramos a lo largo de todo el recorrido.

El grupo rodaba a buena velocidad, alrededor de 20km/h de media durante los primeros 60km. En una ocasión tire de el junto a Antonio Martinez y otra biker del grupo, cuando de repente en un cruce tiramos recto, confundiéndonos del camino a seguir, se creo la duda en el grupo, y la sorpresa fue que a ninguno nos pitaba el gps para avisar de la dirección a seguir en los cruces, lo que hace que no tengas que ir tan pendiente del gps, agrabandose mucho más cuando se hizo de noche, y había que tocar continuamente la pantalla del gps para que se iluminara y poder ver el rumbo a seguir. En el grupo va un biker de la zona, quien nos va narrando lo que nos encontraremos mas adelante.

Poco a poco vamos abandonando la zona llana, por así decirlo, nos vamos encontrando suaves subidas que tímidamente van sumando metros en el desnivel acumulado. Recuerdo una subida de asfalto muy rota tras un avituallamiento, posiblemente el avituallamiento de Pelayos de la Presa km 60, aunque en verdad lo que recuerdo bien es la bajada de después, de unos 250m, muy pronunciada y con un firme duro con tierra, donde no había forma de frenar y mucho menos controlar la bicicleta, por lo que tuve que frenar contra un arbusto (recordando una experiencia parecida de la primera etapa de la MedXtrem), salvando milagrosamente la caída, de tras de mi otro corredor tuvo que tirarse para evitar otra una caída mas grave.

Pasando el pueblo del Tiemblo, km 80, ruedo solo un gran tramo por asfalto, rodeando el Embalse de Burguillo y río Alberche, adelanto a Curro y una pareja del Club Xalima, quienes han parado en una fuente a refrescarse, sigo mi rodar en solitario hasta llegar a la localidad de Navaluenga, kilómetro 108.

El terreno va tirando como vergonzoso hacia arriba, mostrandonos a lo lejos la temerosa Sierra de Gredos, con la que nos tendriamos que enfrentar en varias ocasiones. Lentamente llegamos a la localidad de Navarrevisca, fin de los que optaron por hacer la modalidad Avant, 131km. Me vuelvo a encontrar con el grupo, paramos a comer, refrescarnos y descansar, pues lo que a continuación viene es lo más duro. Aprovecho una fuente que hay en el lugar para sentarme y zambullir las piernas en su fría agua, mientras que doy unos pocos bocados a un bocadillo.

Decir, que los numerosos avituallamientos puesto a lo largo del recorrido, un total de 8 para la categoría Premiun y 5 para la Avant, se encontraban muy bien colocados y con abundante comida y bebida.

Continuo en solitario, tras dejar atrás la localidad de Navarrevisca, me en encuentro con Gonzalo Barriga, asistente de Ángel Denche, el cual va en su búsqueda por sufrir una avería. Continuo mi camino pues lo que viene a continuación es la subida más larga y temida, ascensión al Puerto del Pico, según me voy acercando va aumentando mi asombro hacia los paisajes con los que me voy encontrando, echando en falta un servicio fotográfico que inmortalice dichos dichos momentos y te sirvan de recuerdo.

La subida va de menos a más, aumentando el desnivel y empeorando el terreno, encontrando bastante piedra suelta, que junto el cansancio acumulado, hacia que tuviera que poner pie en tierra en más de una ocasión, al igual que otros participantes que me encontraba por el camino. 

En este tramo, algo agónico, y en el total del recorrido, exceptuando los avituallamiento/puntos de control, no me encontré a nadie de la organización, lo que a veces daba sensación de abandono por parte de la misma, no olvidar que en el dorsal venían números de emergencia por si ocurría algo, pero no esta de más, poner a voluntarios en algunos puntos y así sentirte algo más tranquilo.

Termina la ascensión, y en la cima encontramos uno de los puntos de control sorpresa que la organización avisó que iba haber, a continuación, la tan popular bajada, nos avisan que tomemos precaución.

Precaución??? no veo lógico meter dicha bajada. Es cierto que en la charla informativa nos dijeron que este es el mtb que a ellos les gusta y que quieren dar a conocer, pero creo que metiendo este tipo de terreno no  van a sacar la mejor publicidad de la prueba por parte de los participantes, que a fin de cuentas es la que más cuenta. Después de más de 150km no solo faltan fuerzas, sino que los reflejos tampoco están tan precavidos como al inicio. Al principio la descendía a momentos montado y otros a pié, hasta que llego un punto que estaba tan harto de subirme y bajarme de la montura, que opte seguir a pie, un descenso de 1,7km tardé en hacerlo una hora, una vereda, como nos indicaron, senderista, que pocos bikers, muy finos técnicamente hablando, lograron hacerla más tiempo en bici que a pie.

Y mientras tanto, mi asistente esperando:

Se termina dicho calvario, sigo en solitario, y tras un pequeño zona rompepienras, el terreno vuelve a ser algo favorable, una pista ancha, que invitar a rodar, paralela al río Tormes, donde se encuentran númerosas zonas de baño, y campamentos infantiles, que nos llevará al penúltimo avituallamiento/punto de control, alrededor del kilómetro 183, donde me vuelvo a encontrarme con mi asistente, Javier García, el cual me esperó en varios puntos que habíamos acordado previamente. Cambio bidones, relleno camelbak, repongo de geles los bolsillos del maillot, como algo, monte de nuevo el foco en el manillar, pues temo que se me eche la noche encima, y quedo con Javier en que me espere ya en meta, iluso de mi....

Continuo hacia la subida del Cancho, donde me vuelvo otra vez más y hago unos 400m más de ascensión, por no percatarme de un camino que salia a derechas paralelo al mismo. Tras corregir el rumbo me encuentro de nuevo con Curro Gomez, me separo de el en el descenso, pero pronto volveremos a juntarnos en la subida de la Buitrera, donde de nuevo tendríamos que poner en pie en tierra, en dicha subida nos alcanza otro biker con el que compartimos km, nos indica que vamos de los ultimos, que todos los demás no han pasado el corte anterior, y que el ultimo tiempo de corte, establecido a las 23:00, ha sido ampliado hasta las 23:30, siendo finalmente ampliado hasta las 00:00.

Coronamos la Buitrera, seguimos rodando los tres juntos, y se crea la duda sobre si la subida anterior era la penúltima (Buitrera) o la última (Risco del Rayo), yo opino que es la penúltima, que aún nos queda otra, los otros dos bikers discrepan, pero pronto una gran subida me da a mi la razón. Nos quedamos solos Curro y yo (momento en el que ambos coincidimos en la mala elección de acudir a dicha prueba con un 32 de plato, siendo la apuesta acertada un 30), hicimos gran parte de la subida andando, sobre todo el ultimo tramo, donde antes de coronar dos miembros de la organización, nos ayudan cogiendo nuestras bicicletas y subiendonoslas hasta la cima, e informándonos, que desde que están ahí, no han visto a nadie que haya realizado dicha subida entera dando pedales. A lo lejos oímos voces y motos, son los 2 o 3 últimos participantes escoltados por las motos. A continuación un descenso campo a través, cuyo trazado esta indicado por balizas prácticamente inapreciables. Se nos echa la noche encima. Decido esperar a Curro ya que va sin luz, nos alcanzan y superan los dos últimos bikers más técnicos en la bajada, por lo que somos ahora nosotros los escoltados por las motos escobas. 

Se acaba el descenso, ultimo de la jornada, y decido tirar yo solo, ya que ya no me preocupaba que Curro se quedase solo, pues las motos llevaban luces. Llego al ultimo avituallamiento, kilómetro 207, Aliseda de Tormes, donde están Barriga y Denche (que se retiro tras el descenso del Puerto del Pico), ademas de unos dos o tres bikers, engraso cadena y como algo, y continuo de nuevo en solitario, cuando de repente oigo la voz de Gonzalo Barriga, quien me grita y aconseja que me espere y vaya lo que me queda en grupo, (por qué no le haría caso)pero las fuerzas de repente me resurgieron como si fuera el inicio de la prueba, y decido continuar.

Pronto caigo en mi error, pues la noche hace que tenga que tocar continuamente el gps para que este se ilumine y poder seguir el track, aun así me confundí varías veces, cuando ocurre lo inesperado, se enciende el piloto rojo del foco, avisador de que le queda poca batería, por lo que tengo que bajar la intensidad de la luz para ahorrar batería y aumentar el ritmo, algo poco aconsejable, pero la circunstancias son las circunstancias. Durante un momento volví a oír el motor de las motos e incluso vi de lejos algún foco, transmitiéndome tranquilidad pues si me quedaba sin luz la compañía no estaba muy lejos. Pero dicho motor y luz, pronto se dejaron de oír y ver, añadiéndole alguna que otra confusión e el trayecto. 

No entiendo como "meten" ese último tramo, pues si la hora inicial propuesta como corte en meta son las 23:00, se da por hecho que hay quien llegará de noche, por lo que poner de noche este tipo de trazado tan "laberintico" no es la mejor opción.

Continuo concentrado, bajo el ritmo, para no confundirme más, cuando de repente suena mi teléfono, decido no cogerlo, pues lo tengo en la camelbak, y perdería mucho tiempo en pararme, quitarme la mochila y responder la llamada, por lo que sigo, cuando el teléfono vuelve a sonar, ahora si paro y cojo la llamada, es el director de la prueba, tras comunicarle mi ubicación me indica que continué hasta los Llanos de Tormes, que soy el último participante que sigue en carrera, y que ya he superado el tiempo de corte, algo no me cuadra pues en el ultimo avituallamiento supere a varios bikers. 

Llego a la localidad citada anteriormente, y mientras espero al coche, un gran cabreo inunda mi mente.

En el coche que viene a buscarme viene mi amigo y asistente Javier, junto a los dos motoristas escobas, quienes me comunican que me he quedado a apenas 5 kilómetros de meta, que los 3 o 4 últimos bikers que estaban en el ultimo avituallamiento finalizaron la prueba por carretera, escoltados por las motos, que una de las motos fue en mi búsqueda para indicarme que siguiera por carretera junto a los otros, pero no dio conmigo.... todo ello aumento mi cabreo. Me preguntan si quiero seguir en bicicleta escoltado por ellos o me monto en el coche, les pregunto que si se me consideraría finisher, respondiéndome que no, pues ya no había nadie en meta, por lo que decido montarme en el coche.

Llegamos al Barco de Avila, dirección al castillo donde se encuentra la meta, pero antes de llegar a la misma localizo mi coche, por los que les pido que me dejen ahí, negándome a subir al castillo. Acabando mi odisea en la Rumbo A Gredos Non Stop.

Primera prueba en la que participo en la que no soy finisher, quedando en la posición 42, algo errónea, debiendo ser la 33, pero sinceramente me da igual. Destacar que solo la acabaron, en categoría premium individual, considerandose finishers, 32 bikers de un total de 84 que tomaron la salida, a mi parecer un fracaso a nivel organizativo, ya que cuando se organizan este tipo de pruebas, bajo mi punto de vista, dentro de la dureza de la misma, se hacen para que la acaben el mayor número de participantes, y se intenta que la misma se finalice con un buen sabor de boca, haciendo que el boca a boca aumente el número de inscritos en siguientes ediciones, en el caso que las haya.

"Todo lo anterior esta contado bajo mi punto de vista, habrá quien opine lo mismo y quien no, toda crítica que haya hecho en dicha crónica es de modo constructiva, y espero que se entiendan de esta forma. Dar la enhorabuena a todos los participantes que tomaron la salida y en especial a los que lograron llegar a meta. Ahora toca plantearse si acudir o no a la segunda edición, en el caso que la haya y quitarse esta espinita ".